martes, 16 de junio de 2015

El Suelo y sus tipos

Suelos
Se denomina suelo a la parte superficial de la corteza terrestre, biológicamente activa, que proviene de la desintegración o alteración física y química de las rocas y de los residuos de las actividades de seres vivos que se asientan sobre ella.

Los suelos son sistemas complejos donde ocurren una vasta gama de procesos físicos y biológicos que se ven reflejados en la gran variedad de suelos existentes en la tierra.

Son muchos los procesos que pueden contribuir a crear un suelo particular, algunos de estos son: la deposición eólica, sedimentación en cursos de agua, meteorización, y deposición de material orgánico.

De un modo simplificado puede decirse que las etapas implicadas en la formación del suelo son las siguientes:

Disgregación mecánica de las rocas.
Meteorización química de los materiales regolíticos, liberados.
Instalación de los seres vivos (microorganismos, líquenes, musgos, etc.) sobre ese sustrato inorgánico. Esta es la fase más significativa, ya que con sus procesos vitales y metabólicos, continúan la meteorización de los minerales, iniciada por mecanismos inorgánicos. Además, los restos vegetales y animales a través de la fermentación y la putrefacción enriquecen ese sustrato.

Mezcla de todos estos elementos entre sí, y con agua y aire intersticiales. Inicialmente, se da la alteración de factores físicos y químicos de las rocas, realizada, fundamentalmente, por la acción geológica del agua y otros agentes geológicos externos, y posteriormente por la influencia de los seres vivos, que es fundamental en este proceso de formación. Se desarrolla así una estructura en niveles superpuestos, conocida como el perfil de un suelo, y una composición química y biológica definida. Las características locales de los sistemas implicados —litología y relieve, clima y biota— y sus interacciones dan lugar a los diferentes tipos de suelo.

Los procesos de alteración mecánica y meteorización química de las rocas, determinan la formación de un manto de alteración o eluvión que, cuando por la acción de los mecanismos de transporte de laderas, es desplazado de su posición de origen, se denomina coluvión.

Sobre los materiales del coluvión, puede desarrollarse lo que comúnmente se conoce como suelo; el suelo es el resultado de la dinámica física, química y biológica de los materiales alterados del coluvión, originándose en su seno una diferenciación vertical en niveles horizontales u horizontes. En estos procesos, los de carácter biológico y bioquímico llegan a adquirir una gran importancia, ya sea por la descomposición de los productos vegetales y su metabolismo, por los microorganismos y los animales zapadores.


El conjunto de disciplinas que se abocan al estudio del suelo se engloban en el conjunto denominado Ciencias del Suelo, aunque entre ellas predomina la edafología e incluso se usa el adjetivo edáfico para todo lo relativo al suelo. El estudio del suelo implica el análisis de su mineralogía, su física, su química y su biología.




https://es.wikipedia.org/wiki/Suelo


Formación del suelo

Tipos de suelos
El suelo procede de la interacción entre la atmósfera, y biosfera. El suelo se forma a parir de la descomposición de la roca madre, por factores climáticos y la acción de los seres vivos. Esto implica que el suelo tiene una parte mineral y otra biológica, lo que le permite ser el sustento de multitud de especies vegetales y animales.
La descomposición de la roca madre puede deberse a factores físicos y mecánicos, o por alteración, o descomposición química. En este proceso se forman unos elementos muy pequeños que conforman el suelo, los coloides y los iones. Dependiendo del porcentaje de coloides e iones, y de su origen, el suelo tendrá unas determinadas características.
La materia orgánica procede, fundamentalmente, de la vegetación que coloniza la roca madre. La descomposición de estos aportes forma el humus bruto. A estos restos orgánicos vegetales se añaden los procedentes de la descomposición de los aportes de la fauna, aunque en el porcentaje total de estos son de menor importancia.
La descomposición de la materia orgánica aporta al suelo diferentes minerales y gases: amoniaco, nitratos, fosfatos, ... Estos son elementos esenciales para el metabolismo de los seres vivos y conforman la reserva trófica del suelo para las plantas, además de garantizar su estabilidad.

Clasificación de los suelos

El suelo se clasificar según su textura: fina o gruesa, y por su estructura: floculada, agregada o dispersa, lo que define su porosidad que permite una mayor o menor circulación del agua, y por lo tanto la existencia de especies vegetales que necesitan concentraciones más o menos elevadas de agua o de gases.
El suelo también se puede clasificar por sus características químicas, por su poder de absorción de coloides y por su grado de acidez (pH), que permite la existencia de una vegetación más o menos necesitada de ciertos compuestos.
Los suelos no evolucionados son suelos brutos, muy próximos a la roca madre y apenas tienen aporte de materia orgánica. Son resultado de fenómenos erosivos o de la acumulación reciente de aportes aluviales. De este tipo son los suelos polares y los desiertos, tanto de roca como de arena, así como las playas.
Los suelos poco evolucionados dependen en gran medida de la naturaleza de la roca madre. Existen tres tipos básicos: ránker, rendzina y los suelos de estepa. Los suelos ránker son más o menos ácidos, como los suelos de tundra y los alpinos. Los suelos rendzina se forman sobre una roca madre carbonatada, como la caliza, suelen ser fruto de la erosión y son suelos básicos. Los suelos de estepa se desarrollan en climas continentales y mediterráneo subárido. El aporte de materia orgánica es muy alto. Según sea la aridez del clima pueden ser desde castaños hasta rojos.
Suelo evolucionado
En los suelos evolucionados encontramos todo tipo de humus, y cierta independencia de la roca madre. Hay una gran variadad y entre ellos se incluyen los suelos de bosques templados, los de regiones con gran abundancia de precipitaciones, los de climas templados y el suelo rojo mediterráneo. En general, si el clima es propicio y el lugar accesible, la mayoria de estos suelos están hoy ocupados por explotaciones agrícolas.
http://www.astromia.com/tierraluna/suelos.htm

Los tipos de suelos y sus propiedades



Es importantísimo conocer la tierra que tienes en tu jardín. Con estas páginas intentaré explicarte cómo puedes hacerlo y qué consecuencias prácticas sacar de todo ello, que es lo más interesante. El tema del suelo puede resultar un poco denso, pero intentaré hacerlo lo más llevadero posible. De todas maneras aquí lo tendrás para cuando necesites consultarlo. También te digo una cosa: si intentas buscar esta información en libros te costará. O son muy técnicos o son muy simplistas. A ver si consigo algo intermedio. Empezamos pues.

Conocer el suelo de tu jardín es, como sabes, fundamental. Cuanto más sepas de él, muchísimo mejor. Te servirá para tomar decisiones respecto a qué plantar y principalmente,cómo cultivar tus plantas. Lo veremos más abajo. En el suelo es donde viven las raíces, y éstas necesitan un medio en el que se sientan a gusto. 

De él toman el agua y los nutrientes minerales (nitrógeno, fósforo, potasio, etc.). 

No hay dos suelos iguales. Cada uno tiene sus propias características físicas, químicas y biológicas. El de tu vecino no es igual que el tuyo. Se puede parecer mucho, pero seguro que hay variaciones. Por ejemplo, el contenido en nutrientes: si tú has fertilizado la tierra durante años con compost, será más rica en humus y en nitrógeno que otra que nunca recibió esas aportaciones.

Aun dentro de tu jardín, sobre todo si es grande, habrá zonas diferenciadas. Por ejemplo, si está en pendiente, la zona baja será más profunda en cuanto a tierra fértil, ya que habrá recibido suelo erosionado de la zona superior y ahí crecerán más las plantas. Piensa que cuando se estudia el suelo de una parcela agrícola, se toman muestras de diferentes puntos y se analizan por separado: el suelo que está junto a un arroyo no es el mismo que el de lo alto de un cerro porque su formación geológica es diferente.



¿Qué tengo que hacer para conocer perfectamente mi suelo? Analizar unas cuantas características fundamentales, que son estas 6

Textura del suelo

La textura se refiere al tamaño de las partículas que tiene un suelo. Hay 5 texturas básicas:

a. Textura arcillosa

Un suelo con textura arcillosa es aquel en el que predomina la arcilla. Piensa en un fango como lo más arcilloso que hay.

b. Textura arenosa


El suelo de textura arenosa tiene sobre todo arena. La playa sería el ejemplo extremo.

c. Textura franca


Suelo de vega

En un suelo con textura franca abunda el limo. Es algo intermedio a los dos anteriores. Ni es arcilloso, ni es arenoso. Son suelos francos típicos los de las vegas de los ríos.

d. Textura franco-arcillosa

Entre arcilloso y franco. Tiene bastante arcilla pero también lleva mucho limo. De arena, poca.

e. Textura franco-arenosa

Entre franco y arenoso.

¿Y qué es la arcilla, la arena y el limo que he mencionado? Partículas minerales que se diferencian en su tamaño (me da igual qué tipo de minerales sean).

• Arcilla son partículas minerales que miden menos de 0,001 milímetro. Toda partícula mineral que haya en el suelo y mida menos de 0,001 mm, es arcilla.

• Limo son partículas minerales de entre 0,001 milímetro y 0,01 mm. 

• Arena son partículas minerales de entre 0,01 y 0,1 milímetros.

Bien, pues según la proporción que haya de un tipo de partículas u otras tendremos las diferentes texturas. Por ejemplo, si un suelo tras analizarlo en el laboratorio sale que está compuesto por:

- 60 % arcilla
- 20 % limo
- 20 % arena

Se mira un gráfico (triángulo de texturas) y se ve que se trata de un suelo arcilloso.

Por lo tanto, tu suelo tendrá una de estas 5 texturas mencionadas. ¿Cuál? Eso es lo que tendrás que averiguar. ¿Y cómo? Hay 2 formas:

1. Llevando una muestra a un laboratorio especializado que analicen tierras. Obtienen el dato exacto del porcentaje de arcilla, de limo y de arena. Para un jardín particular, la mayoría de las veces es mejor hacerlo de la siguiente forma:


2. Manualmente, por el llamado "método del churrito": cogemos un poco de tierra en la mano y la humedecemos. Se amasa y se hace un "churrito" de unos 3 milímetro de grosor. Se intenta hacer un "rosco" con él. Si no aparecen grietas (con la plastilina no aparecerían) es que es arcilloso. También por el mismo tacto: más granuloso, suelo arenoso; más suave, más parecido a plastilina, suelo arcilloso. Ni granuloso, ni plastilina, suelo medio, franco, o franco-arcilloso, o franco-arenoso. Pero por no extenderme más, si quieres ver los detalles del método. El resultado nos sirve perfectamente.

Ahora vamos a lo práctico. Ya sabes qué textura tiene tu suelo, pero ¿para qué quieres conocer este dato? Analicemos los dos casos extremos:

- Suelo arcilloso
- Suelo arenoso

http://www.tecnicoagricola.es/texturas-de-suelos-agricolas/


Estructura del suelo
La estructura o forma en la que se encuentra el suelo se determina por:
  • El tipo: aspecto o forma de grumos.
  • La clase: tamaño de los grumos.
  • La categoría: grado de distinción de grumos.
El color de un suelo varía desde negro, rojo, amarillo y gris. En el Trópico de Cochabamba existen suelos arenosos de color gris y blanquecino; suelos limosos de color crema y café claro; y suelos arcillosos de color café oscuro y plomo.
Las propiedades químicas del suelo depende de la cantidad de los distintos minerales y otras sustancias que componen el suelo. El contenido de nitrógeno, fósforo, potasio, calcio y magnesio debe ser abundante y equilibrado. El suelo puede ser ácido, alcalino o neutro.
Para entendernos mejor, explicaremos cuándo un suelo es ácido, alcalino o neutro:
  • Un suelo ácido es aquel que presenta ciertos elementos químicos de carácter ácido en mayor proporción que otros. En el Trópico de Cochabamba la mayoría de los suelos son ácidos.
  • Un suelo neutro es cuando presenta porcentajes equilibrados y disponibilidad de los elementos químicos primarios y secundarios. El boro, aluminio, zinc, hierro y litio también están presentes en menor proporción.
  • Un suelo salino alcalino es aquel que presenta azufre, calcio, magnesio, manganeso y molibdeno en mayor proporción que otros compuestos. Estos elementos, cuando se encuentran en concentraciones mayores, hacen que un suelo sea salino o alcalino.
EDUCACIÓN AMBIENTAL PARA EL TRÓPICO DE COCHABAMBA
En el Trópico de Cochabamba existen cuatro clases de suelos según la textura.
  • Suelos arenosos: ásperos y no manchan la mano.
  • Suelos franco arenosos: ásperos, manchan la mano y no forman figura.
  • Suelos franco arcillosos: manchan la mano y se pueden moldear.
  • Suelos arcillosos limosos: fáciles de amoldar, forman figuras y son pegajosos.
Si bien existen cerca de siete tipos de suelo, en su mayoría, la capacidad del uso del suelo es de producción forestal extensiva y permanente.
El suelo es donde caminamos los humanos y los animales, en el suelo crecen las pequeñas y grandes plantas, por el suelo corre el río, en el suelo los humanos y los animales hacen sus casas, en el suelo hacemos nuestro chaco donde sembramos las plantas que dan alimentos para comer.
Los suelos tienen vida, ahí adentro viven lombrices, hongos y bacterias y, a la vez, proporcionan vida a plantas, animales y seres humanos.

http://www.fao.org/docrep/009/ah645s/ah645s04.htm

http://articulos.infojardin.com/articulos/Textura.htm



Composición química del suelo
La composición química del suelo incluye la media de la reacción de un suelo (pH) y de sus elementos químicos (nutrientes). Su análisis es necesario para una mejor gestión de la fertilización, cultivo y para elegir las plantas más adecuadas para obtener los mejores rendimientos de cosecha.

La reacción del suelo o pH
La reacción de un suelo hace referencia al grado de acidez o basicidad del mismo y generalmente se expresa por medio de un valor de pH del sistema suelo-agua. El pH es la medida de la concentración de iones de hidrógeno [H+]. Según este valor, un suelo puede ser ácido, neutro o alcalino. Las propiedades físicas, químicas y biológicas del suelo están influenciadas por la acidez o basicidad del medio, que a su vez condicionan el uso agronómico del suelo. Así, la mayoría de las plantas prefieren rangos de pH de 5,5 a 7,5, pero algunas especies prefieren suelos ácidos o alcalinos. Sin embargo, cada planta necesita un rango específico de pH, en el que poder expresar mejor su potencialidad de crecimiento.

Del pH también dependen los procesos de humificación. En función del pH se producen distintos tipos de materia orgánica del suelo y propiedades que influyen directamente sobre el crecimiento vegetal como el movimiento y disponibilidad de los nutrientes o los procesos de intercambio catiónico.

El pH influye sobre la movilidad de los diferentes elementos del suelo: en unos casos disminuirá la solubilidad, con lo que las plantas no podrán absorberlos; en otros el aumento de la solubilidad debida al pH, hará que para determinados elementos sea máxima (por ejemplo, cuando hay mucha acidez se solubiliza enormemente el aluminio pudiendo alcanzarse niveles tóxicos). Cada planta necesita elementos en diferentes cantidades y esta es la razón por la que cada planta requiere un rango particular de pH para optimizar su crecimiento. Por ejemplo, el hierro, el cobre y el manganeso no son solubles en un medio alcalino. Esto significa que las plantas que necesiten estos elementos deberían teóricamente estar en un tipo de suelo ácido. El nitrógeno, el fósforo, el potasio y el azufre, por otro lado, están disponibles en un rango de pH cercano a la neutralidad.

Valores de pH más deseables, según cultivos:

Intervalo de pH
Intervalo de pH
Intervalo de pH
Cultivo
Mín.
Máx.
Cultivo
Mín.
Máx.
Cultivo
Mín.
Máx.
Acelga
6
7.5
Col de Bruselas
5.7
7.3
Nogal
6
8
Agrios
6
7.5
Coliflor
6
7.3
Olivo
6
8
Alfalfa
6.2
7.8
Colza
6
7.5
Patata
4.8
6.5
Algodón
5
6
Dactilo
5.5
7.2
Pepino
5.7
7.3
Agrostis
5
6
Escarola
5.6
6.7
Peral
5.6
7.2
Almendro
6
7
Espárrago
6.2
7.7
Pimiento
7
8.5
Apio
6.1
7.4
Espinaca
6.2
7.6
Pino
5
6
Arroz
5
6.5
Festuca ovina
4.5
6
Plátano
6
7.5
Avellano
6
7
Festuca pratense
4.5
7
Poa pratense
5.5
7.5
Avena
5
7.5
Fleo
5.5
8
Rábano
6
7.5
Ballico
6
7
Girasol
6
7.5
Remolacha
6.1
7.4
Berenjena
5.4
6
Guisante
6
7.5
Soja
6
7
Boniato
5.1
6
Judía
5.6
7
Tabaco
5.5
7.5
Brócoli
6
7.3
Lechuga
5.5
7
Tomate
5.5
7
Cacahuete
5.3
6.6
Lino
5
7
Trébol blanco
5.6
7
Calabaza
5.6
5.7
Maíz
5.5
7.5
Trébol híbrido
5.5
7
Caña de azúcar
6
8
Manzano
5.4
6.8
Trébol rojo
5.5
7.5
Castaño
5
6.5
Melitoto
6.5
7.5
Trébol violeta
5.7
7.6
Cebada
6.5
8
Melón
5.7
7.3
Trigo
5.5
7.5
Cebolla
6
7
Melocotonero
5.2
6.8
Veza
5.2
7
Centeno
5
7
Membrillero
5.7
7.2
Vid
5.4
6.8
Col
5.5
7.5
Nabo
5.5
6.8
Zanahoria
5.7
7

La génesis del suelo se ve influenciada por la acidez o alcalinidad de su solución. Al aumentar la acidez del suelo, la flora bacteriana se ve desplazada por el predominio de hongos, con lo que la nitrificación y otros procesos dependientes de la actividad bacteriana se verán afectados. Por tanto, en condiciones de fuerte acidez, la fijación del nitrógeno y la mineralización de residuos vegetales se reduce. Las plantas absorben los nutrientes disueltos en el agua del suelo y la solubilidad de los nutrientes depende en gran medida del valor de pH.

Caracterizar con exactitud la reacción del suelo tiene como principal objetivo diagnosticar las condiciones que rigen en los procesos edafogenéticos, en la translocación de elementos, en la disponibilidad de nutrientes, en cuanto a los problemas de toxicidad, en la actividad biológica, etc.

La medida del pH del suelo en agua es una determinación sencilla, pero de gran valor, pues sirve como criterio para decidir la necesidad de otros análisis y las técnicas a utilizar. Sin embargo, también se puede medir el pH en KCl que, junto con el pH en agua, da una idea del grado de saturación del complejo de cambio; el pH en NaF es útil para detectar la presencia de compuestos amorfos en posibles horizontes espódicos o en andosoles.

Gestión del suelo en relación con los valores de pH.
Como hemos visto, la elección del cultivo depende del valor del pH del suelo, por ello se recomienda elegir cultivos que estén indicados para el rango analizado.

Gestión de suelos ácidos.

Cantidad (g/ha) de compuesto puro necesaria para aumentar 1 unidad el pH
Material
Suelo
Arcilloso
Vegetal
Arenoso
Óxido cálcico (cal caústica o viva) (CaO)
30-50
20-30
10-20
Hidróxido cálcico (hidratado o cal muerta) Ca(OH)2
39-66
26-39
13-26
Roca caliza dolomítica CaMg (CO3)2
49-82
33-49
16-33
Roca caliza calcítica CaCO3
54-90
36-54
18-36

Hay varios factores que influyen sobre la acidez de los suelos. El calcio, el magnesio y el potasio, se eliminan del suelo a través de la erosión, la lixiviación y la recolección del cultivo, incrementándose la acidez de los suelos. Además, la utilización de fertilizantes acidificantes incrementa los niveles de acidez de los suelos. Por ejemplo, la conversión de los fertilizantes amónicos a nitratos ocasiona la formación de suelos ácidos.


Por ello, es importante emplear fertilizantes que no aumenten la acidez (urea, nitrato de calcio, nitrato de amonio y superfosfato) o reduzca la alcalinidad (sulfato de amonio). Sin embargo, el pH del suelo puede ajustarse mediante la aplicación de enmiendas. En suelos ácidos se pueden emplear sustancias correctoras como cal, dolomítica, piedra caliza y marga, según la naturaleza del suelo, que tienen la capacidad de neutralizar los ácidos del suelo.
El material calizo más común y económico que se encuentra disponible es la roca caliza agrícola. Las rocas calizas que contienen tanto calcio como magnesio de denominan rocas dolomíticas y las rocas que contienen únicamente calcio se denominan calcíticas. Cuando los suelos son ácidos y los niveles de magnesio son bajos, conviene incorporar roca caliza dolomítica, para así, incrementar tanto epH como los niveles de magnesio.

Por tanto, la cal incorporada al suelo tiene cinco funciones:

1) Neutraliza el suelo. La mayoría de las plantas no se desarrollan correctamente en suelos ácidos.
2) Intensifica la disponibilidad de los nutrientes para las plantas.
3) Incrementa la efectividad del nitrógeno, del fósforo y del potasio incorporados.
4) Incrementa la actividad de los microorganismos, incluyendo los responsables de la fijación del N en las leguminosas y de la descomposición de la materia orgánica.
5) Intensifica el crecimiento de la planta y por tanto el rendimiento productivo del cultivo.

Gestión de suelos básicos.
Los niveles altos de pH en los suelos pueden depender de diferentes elementos, por lo que hay diversos métodos para su corrección.
En suelos ricos en piedra caliza se recomienda añadir sustancias orgánicas y en los suelos alcalino-salinos la alcalinidad se debe a la presencia de sales, en particular a una alta concentración de sodio.
Si la alcalinidad está causada por sodio, se recomienda añadir sustancias como el yeso (sulfato de calcio), sulfuro u otros sulfúricos.

Cantidades que dan el mismo resultado que 100 Kg de yeso.
Compuesto puro
Cantidad (Kg)
Cloruro de calcio: CaCl · 2 H2O
85
Ácido sulfúrico: H2SO4
57
Sulfuro: S
19
Sulfato de Hierro: Fe2(SO4)3 · 7 H2O
162
Sulfato de Aluminio: Al2(SO4)3
129

http://www.infoagro.com/abonos/analisis_suelos.htm


Fertilidad del suelo
    Algunos nutrientes químicos en el suelo son estables (fósforo) mientras que otros se pierden o se consumen muy fácilmente (nitrógeno). Un agricultor necesita hacer una aplicación básica y suficiente de nutrientes para empezar su huerto, y luego mantener una aplicación regular de los mismos mientras el cultivo crece. Un suelo pobre, puede llegar a ser productivo si está bien manejado. El abono y el compost son necesarios para mejorar la estructura del suelo (los fertilizantes químicos son necesarios para una mayor producción). El método comun es cavar un hoyo para producir y mezclar el compost, la materia orgánica, el abono y utilizarlos en el suelo, justo antes de plantar los cultivos. Esta es la aplicación básica. Después de plantar, aplique pequeñas cantidades de abono alrededor de la planta y añádalo aproximadamente cada dos semanas hasta cuando se produzca la cosecha.
Compost
    El compost es muy fácil prepararlo y no cuesta nada si usted tiene tiempo, espacio en su huerto y acceso a los desechos de los animales de la granja o de la cocina, así como hojas y pasto cortado. El compost si se lo hace en un hueco común los nutrientes se pierden en el suelo debajo del hueco. Por esta circunstancia es mejor hacerlo formando un montón. Haga el compost en capas y añada los restos de cocina cada día. Es indispensable remover el montón cada mes, con el fin de ayudarle a que se prepare mejor. Este toma tres o cuatro meses para presentarse oscuro y listo para su utilización. Coloque el montón en un sitio donde usted puede rodearlo con ladrillos o con plantas grandes. Sólo en caso que usted no tenga acceso a los abonos orgánicos recurra al uso de fertilizantes.
Ejemplo de un compost en montón
Fertilizantes
    La forma más rápida para colocar los elementos nutritivos dentro del suelo es usar los químicos o fertilizantes que contengan uno o más de los tres nutrientes químicos que necesitan las plantas (ver cuadro 2). Los fertilizantes pueden eliminarse muy rápidamente, por lo que es necesario que no se apliquen demasiado pronto antes de la plantación. Los fertilizantes son costosos y se encuentran en forma muy concentrada en el comercio. Nunca ponga un fertilizante en el hueco muy cercano a la planta porque esto puede quemar las raíces. Es mejor dispersar el fertilizante y mezclarlo ligeramente en la superficie del suelo.
Uso de cercas
Abono verde y compost para cultivos
    Otra vía para alimentar el suelo es el uso de abono verde que puede ser utilizado como compost, especialmente las legumbres, las cuales colectan y retienen nitrógeno. Los árboles de vaina, pueden crecer junto a los cultivos alimentarios y sus ramas, ocasionalmente podadas, quedarse en el suelo como abono. Plantas leguminosas más bajas pueden ser plantadas junto a un cultivo alimentario para mejorar el suelo y mantener alejadas a las plagas.
Abono verde para cultivos
Cercas vivas
Abono verde/compost
Laucaena
Flemingia sp.
Gliricidia sp.
Pigeon pea (Cajanus sp.)
Setaria sp.
Pastos
Centro (Centrosema sp.)
Puero (Puerina sp.)

Uso de compost y majada
    La majada puede ser secada a la sombra, por ejemplo, dentro del establo, y posteriormente almacenada para su uso futuro. La majada fresca puede quemar las plantas si se la coloca muy cerca de ellas. El compost es mejor cuando es ligero y no pegajoso. Tanto el compost como la majada pueden ser mezclados dentro del suelo, en el hoyo que se hace antes de plantar un árbol o en las excavaciones del huerto antes de plantar los vegetales o los cultivos alimentarios. El compost de zanja (figura 4) es útil para el crecimiento de nuevos cultivos o para la alimentación de otros ya establecidos. El compost y la majada pueden ser también diseminados en la superficie del suelo, pero es mejor si está protegido de la luz solar. Un compost bien revuelto, mezclado con un suelo arenoso se puede usar en un vivero.
Cercas de compost
Capa de hierba
    Otra vía para alimentar el suelo es utilizar una capa de hierba o paja, la cuál protege el suelo de la erosión. La paja y trozos de majada deberán ser dispersados y su espesor deberá ser de cuatro a seis centímetros alrededor de la planta.

    Capa de hierba
http://www.fao.org/docrep/v5290s/v5290s30.htm


Capacidad Productiva de los Suelos
En República Dominicana el estudio de clasificación de los suelos de acuerdo a su capacidad productiva, se realizó en 1967, formando parte del proyecto “Reconocimiento y Evaluación de los Recursos Naturales de la República Dominicana”, auspiciado por la Organización de los Estados Americanos (OEA).
Esta clasificación consistió en una agrupación de informaciones edafológicas, tales como profundidad efectiva, estructura, disponibilidad de agua, permeabilidad, posición en el terreno y otras, que permitió  determinar las potencialidades y limitaciones de los suelos para su adecuada utilización.
El objetivo del estudio fue crear una base de información  general sobre la capacidad y susceptibilidad de los suelos a ser degradados, su requerimiento de manejo y prácticas de conservación.
Según esta clasificación, se determinaron ocho Clases de Capacidad Productiva, de las cuales, las Clases I hasta la Clase IV se consideran adecuadas para cultivos agrícolas, con prácticas específicas de uso y manejo. Las Clases V hasta la Clase VII se consideran no cultivables, aunque los métodos modernos con mecanización consideran también que la Clase V puede destinarse al pastoreo y al cultivo de arroz con medidas muy intensivas de manejo.
Y, por último, la Clase VIII se considera apta solamente para parques nacionales y zonas de vida silvestre.
Los suelos Clase I ocupan la menor superficie del territorio nacional, concentrando su localización en parte del valle del Cibao y una pequeña porción en el valle de San Juan y en la provincia Elías Piña.
La Clase II se localiza en las márgenes de los ríos Yaque del Norte, Yaque del Sur, Yuna, Bajabonico, Macasías e Isabela.
Las Clases III y IV están distribuidas en su gran mayoría en parte del litoral sur y en las regiones suroeste y noroeste. La Clase V ocupa áreas planas de la Llanura Costera del Caribe en la región este, en el Valle del Cibao, en San Juan y en la Hoya de Enriquillo.
La Clase VI ocupa áreas de la Llanura Costera del Atlántico, del Caribe, de la Península de Barahona y de la Hoya de Enriquillo.
La Clase VII ocupa la mayor extensión del país. Comprende la mayor parte de las Cordilleras Central y Septentrional, así como las Sierras de Bahoruco y Neiba, y los montes del Seibo. También incluye partes muy rocosas, muy poco profundas y, en algunos casos, alomadas, de las plataformas de caliza de arrecife del suroeste de Barahona y del sur de Higüey, así como de la extensa plataforma kárstica de Los Haitises.
La Clase VIII ocupa parte de la Llanura Costera de Miches, de la Llanura Costera del Atlántico, de la Cordillera Septentrional y de la Hoya de Enriquillo.

CLASECAPACIDAD PRODUCTIVA Y USO POTENCIALEXTENSIÓN (KM²)PORCENTAJE (%)
ISuelos cultivables, aptos para el riego, con topografía llana y sin factores limitantes de importancia; productividad alta con buen manejo.526.191.09
IISuelos cultivables, aptos para el riego, con topografía llana, ondulada o suavemente alomada, y con factores limitantes no severos. Productividad alta con buen manejo.2,845.455.91
III
Suelos cultivables, aptos para el riego, sólo con cultivos muy rentables, presentan topografía llana, alomada o suavemente alomada y con factores limitantes de alguna severidad. Productividad mediana con prácticas intensivas de manejo.3,599.227.47
IVSuelos limitados para cultivos y no aptos para el riego, salvo con cultivos muy rentables; presentan limitantes severas y requieren prácticas intensivas de manejo.4,184.048.68
V
Suelos aptos para pastos y cultivos de arroz, con limitantes de drenaje; productividad alta para pastos o para arroz con prácticas de manejo7,511.5415.59
VISuelos aptos para bosques, pastos y cultivos de montaña, con limitantes muy severas de topografía, profundidad y rocosidad.4,207.058.73
VIIIncluye terrenos escabrosos de montaña, con topografía accidentada, no cultivables, aptos para fines de explotación forestal.23,584.0848.95
VIII Terrenos no aptos para el cultivo, destinados solamente para parques nacionales, vida silvestre y recreación.1,364.352.83
http://www.ambiente.gob.do/IA/Suelos/Paginas/Capacidad_Prod_Suelos.aspx

Preparación del suelo y sus objetivos

  • Mover la tierra para eliminar la compactación, mejorando los parámetros de agua y aire en el suelo. De esta forma se dan unas características más propicias para el desarrollo de las raíces y por consiguiente las de la planta.
  • Eliminar las malezas del suelo es uno de los objetivos más importantes para conservar los recursos de la propia tierra, en lo que a nutrientes se refiere.
  • A su vez incorporar los mismos rastrojos al suelo para que devuelvan a la tierra con su descomposición los nutrientes prestados y enriqueciendo el suelo de nuevo.
  • Erradicar plagas y enfermedades para el buen desarrollo de las plantas.
  • Trabajar la tierra hasta dejarla con grado de mullimiento adecuado para posterior cultivo.
No hay un orden establecido para cada fase, todo esto dependerá en gran parte del clima en cada terreno y de las plantas que se vallan a sembrar y cultivar.

Los implementos agrícolas para la preparación del suelo y su clasificación.

Hay varias formas de clasificar los implementos agrícolas:
  • Tipo de enganche.
  • Tipo de tracción.
  • Tipo de labor.
  • Tipo de profundidad de trabajo (la más usual)

Implementos agrícolas primarios

preparación del sueloEs toda la maquinaria agrícola que trabaja a una profundidad superior a los 15 o 20 cm que corresponden a equipos para la preparación de la zona de raíces del suelo también denominada como roturación del suelo.
Los arados y sus características:

Arados que invierten o voltean el suelo. Discos y las vertederas.

Son de los más utilizados a nivel mundial, de ellos el de vertederas da una mayor calidad en el acabado de la labor.

Arados que remueven el suelo. Subsolador y chisel (cincel).

El objetivo es agrietar el suelo y moverlo para soltar la compactación del mismo. Recomendable hacerlo con el suelo seco para mejor acabado. También es requerida una mayor potencia del tractor para esta labor porque ofrece una mayor resistencia al implemento o apero agrícola.

Arados que mezclan el suelo. Rotativos.

Requieren una gran potencia al eje de toma de fuerza, están construidos con cuchillas que cortan y voltean el terreno quedando un suelo muy mullido y suelto, ofrecen mejor drenaje.
Implementos agrícolas secundarios
preparación del sueloEs toda la maquinaria agrícola que trabaja por encima de la profundidad de 15 o 20 cm, estos implementos o aperos agrícolas suelen estar en el grupo de preparación de tierra para las semillas y la propia siembra. Rastras de discos, vibro cultivadores, rodillos……
El objetivo principal es preparar la cama para la siembra, eliminar rastrojos y nivelar el terreno.
Otros objetivos son desmenuzar los rastrojos, volteo de siembra, arados de poca profundidad.
Es importante haber hecho una buena labor primaria para que la secundaria cumpla los objetivos marcados y obtener una cosecha exitosa, siempre y cuando el clima acompañe a la labor realizada.
En el clima no podemos influir y difícil de predecir, pues es este el mayor riesgo al que se enfrenta cualquier agricultor, pero esto siempre fue así.
Otros artículos de interés:
He encontrado una entrada muy interesante en el blog “Más que maquinas” donde se plantean algunas cuestiones en lo referente al laboreo convencional o el laboreo mínimo. Lectura recomendada.
http://www.reparatucultivador.com/preparacion-del-suelo/
  ORIGEN
La compactación del suelo corresponde a la pérdida de volumen que experimenta una determinada masa de suelo, debido a fuerzas externas que actúan sobre él. Estas fuerzas externas, en la actividad agrícola, tienen su origen principalmente en:
. Implementos de labranza del suelo.
. Cargas producidas por los neumáticos de tractores e implementos de arrastre.
. Pisoteo de animales.
En condiciones naturales (sin intervención antrópica) se pueden encontrar en el suelo, horizontes con diferentes grados de compactación, lo que se explica por las condiciones que dominaron durante la formación y la evolución del suelo. Sin embargo, es bajo condiciones de intensivo uso agrícola que este fenómeno se acelera y llega a producir serios problemas en el desarrollo de las plantas cultivadas. 
Efectos de la compactación del suelo
La compactación del suelo produce un aumento en su densidad (densidad aparente), aumenta su resistencia mecánica, destruye y debilita su estructuración. Todo esto hace disminuir la porosidad total y la macroporosidad (porosidad de aireación) del suelo. Los efectos que la compactación produce, se traducen en un menor desarrollo del sistema radical de las plantas y, por lo tanto, un menor desarrollo de la planta en su conjunto, lo que redunda en una menor producción (Figura 1).
 

 compactacion suelo.jpg (27957 bytes)
Desarrollo de un cultivo en un suelo sin restricciones físicas de suelos (a) y el mismo cultivo desarrollándose en un suelo que tiene una estrata de suelos compactada (b).
  
De los factores mencionados, son dos los que van a tener un efecto directo sobre el crecimiento de las raíces, estos son:

. Aumento de la resistencia mecánica del suelo.
. Disminución de la macroporosidad del suelo.
El aumento de la resistencia mecánica del suelo va a restringir el crecimiento de las raíces a espacios de menor resistencia, tales como los que se ubican entre las estructuras (terrones), en cavidades formadas por la fauna del suelo (lombrices) y en espacios que se producen por la descomposición de restos orgánicos gruesos (raíces muertas). Esta situación va a producir un patrón de crecimiento característico de raíces aplanadas, ubicadas en fisuras del suelo, con una escasa exploración del volumen total del suelo.

La disminución de la macroporosidad del suelo va a producir una baja capacidad de aireación y oxigenación del suelo, lo que va a producir una disminución de la actividad de las raíces y, consecuentemente, un menor crecimiento de éstas, un menor volumen de suelo explorado, una menor absorción de agua y nutrientes. Este efecto se agrava cuando se riega en forma excesiva, llegando a producirse la muerte de las raíces por asfixia. Esto debido a que los escasos macroporos que pueden airear el suelo van a permanecer llenos de agua gran parte del tiempo. 

   Prevención de la compactación del suelo
La compactación del suelo es un fenómeno difícil de corregir y de un elevado costo. Por lo tanto, hay que tomar las medidas necesarias para que este fenómeno no ocurra o bien se mitigue, de manera que no llegue a niveles que limiten el potencial productivo de la especie cultivada. También debe tenerse en consideración que si bien el problema puede ser aliviado con algunas medidas de corrección, existe el riesgo de recompactar el suelo y el recurso suelo puede quedar en un nivel de mayor degradación. Por lo tanto, luego de aliviada la compactación, es necesario realizar prácticas de manejo de suelos que eviten que este fenómeno se vuelva a producir en forma intensa.

A continuación se presentan los factores que van a incidir en el proceso de compactación del suelo y que deben tenerse en consideración al momento de comprar o arrendar maquinaria agrícola y al programar o realizar las labores agrícolas:

     http://www.abcagro.com/riego/compactacion_suelos.asp

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